Hijos o no hijos ???
Nosotros, por mucho que haga falta una corrección ejemplar, no podemos ni debemos corriger hijos ajenos. Menos, hoy en día, con los “des hechos” humanos que protegen más al delincuente que al hombre justo. Pero, escrituralmente, el Señor nos enseña què, iniciando con su ejemplo, un Padre solamente puede corregir a sus propios hijos. Aunque un hombre o una mujer se casen por segunda ocasión, están muy limitados a corregir a sus hijastros. La palabra de Dios nos dice que las angustias, los problemas, las situaciones desagradables que vivimos quienes hemos reconocido a Cristo como nuestro suficiente salvador… son porque somos sus hijos, y que, por lo tanto, estamos bajo su cobertura, lo que le da el derecho de corregirnos cada vez que lo necesitamos. Dios no corrige a los bastardos, solamente a sus hijos (Hebreos 12:8). Suena duro humanamente, pero asì es en lo espiritual. Señor: Danos un honesto celo por tu casa.